Aunque existe una historia completa en su sitio web, el Padre Kevin Leidich, S.J., uno de los ministros pastorales del centro, también brindó amablemente una descripción general de la historia de su origen. El Retiro de San Ignacio, nombre recomendado por el entonces Arzobispo de San Francisco, Edward Hanna, fue comprado por los Jesuitas en 1925, y el trabajo comenzó poco después de su dedicación. Con el tiempo, se fueron añadiendo algunas parcelas de tierra, y desde entonces los terrenos han sido un refugio sereno para decenas de miles de personas.

Dirigido por la Provincia del Oeste de los Jesuitas, en su centenario, el centro de retiros se ha convertido en un hogar de consuelo y nuevos comienzos para quienes lo visitan y quienes cuidan y trabajan allí, como Dyane, quienes esperan que su misión continúe a perpetuidad.

Un Lugar Para Todas Las Personas

La demografía tanto de los participantes como del personal de JRC revela cómo el lugar reúne a personas de todos los ámbitos de la vida, y esto es fundamental para la espiritualidad ignaciana del centro, basada en el llamado de San Ignacio de “encontrar a Dios en todas las cosas,” especialmente en otros.

Dyane proviene de una perspectiva judía mesiánica, pero se sintió completamente cómoda cuando conoció al Padre Chi Ngo, S.J., director ejecutivo del centro. “Nuestra primera discusión se centró en lo que teníamos en común más que en nuestras diferencias. El Centro de Retiro Jesuita es para personas de todas las religiones, sin fe, junto con los católicos.” Antes de convertirse en director en 2013, el Padre Chi se desempeñó como director de formación de la previa Provincia Jesuita de California y proviene de Ottawa, Canadá.

Según él, varios grupos religiosos utilizan el espacio, que es una excelente oportunidad ecuménica para cualquiera que tenga preguntas sobre el catolicismo o la espiritualidad ignaciana. Dyane ve los frutos de este ambiente acogedor. Ella comentó: “Cada regalo que recibe el Centro de Retiros tiene una historia especial, y me toca leer o escuchar todas esas historias de gratitud.” Ella se considera afortunada de encontrar diariamente la gratitud de los participantes del retiro, lo que añade un significado más profundo a los aspectos logísticos y de recaudación de fondos de su función.

Los Padres Jesuitas

Fiel al carisma ignaciano de “contemplativos en la acción,” el P. Chi participó en nuestra entrevista desde su teléfono celular mientras estaba en acción, haciendo un mandado para el centro. “¡Tal es la naturaleza del lugar!” informó alegremente, refiriéndose al hecho de que siempre parece estar ocurriendo algo en el JRC. Comentó además sobre lo que presencia constantemente en el lugar: “Lo veo todo el tiempo. La gente viene al centro de retiro, ya sea solo un fin de semana o más, con una actitud o punto de vista, y al final de su tiempo, el Espíritu Santo ha entrado allí y son completamente diferentes.” La transformación, de alguna manera, es una experiencia garantizada en el centro.

El Padre Kevin Leidich, S.J., ha trabajado tiempo completo como ministro pastoral en JRC desde 2014 después de enseñar durante más de 30 años en varias escuelas secundarias Jesuitas y programas de espiritualidad para adultos en todo California. Su experiencia con adolescentes, adultos y participantes en retiros de JRC le ha demostrado que todos los grupos comparten el mismo anhelo: sentirse amados, el cual está en el corazón de los ejercicios ignacianos.

Explicó lo que significa eso: “Cuando era joven, San Ignacio experimentó una profunda conversión. Fue puesto en una posición en la que comenzó a experimentar el movimiento de Dios, de un Dios amoroso hacia sí mismo. Es ese mismo movimiento que casi todo el mundo experimenta cuando viene aquí.” Este aspecto de la espiritualidad ignaciana, para él, convierte el centro en un lugar acogedor y de cambios profundos personales tanto para el participante como para el líder. “Como ‘director humano’ de un retiro, reconocer que Dios es el verdadero director a través de la experiencia personal del participante de ser sorprendido por Dios, nos consuela a todos.”

Un Lugar Para Momentos Decisivos

Dos líderes de retiros laicos citaron la participación en los ejercicios como un momento decisivo en sus vidas. Tanto Rita Morton como Annette Venables hablaron de un encuentro con el amor de Dios durante los Ejercicios Espirituales Ignacianos, que cambió sus vidas. En un artículo exclusivo de junio de 2023 publicado en línea por The Valley Catholic, “Encuentro Con lo Sagrado a Través Del Dolor,” Rita compartió que durante un retiro silencioso de 30 días en 2020 después de la sobredosis accidental de su hijo mayor, encontró un consuelo que tendría efectos duraderos. “No me tomó mucho tiempo darme cuenta de mi nueva misión: ayudar a crear programas de sanación para madres en duelo.”

Desde entonces, Rita ha fundado y dirigido Sacred Sorrows, que ofrece retiros y otros programas que permiten a los dolientes procesar su profundo dolor a través de encuentros con el misterio de la gracia de Dios. Ella misma continúa creciendo y sanando, sirviendo a las necesidades espirituales de los demás. “Es un privilegio acompañar las mujeres en un retiro de fin de semana y planificar actividades experienciales para ayudarlas a encontrar la gracia de Dios, y presenciar cómo sus rostros cambian desde el principio hasta el final del fin de semana”.

Al experimentar un cambio sísmico similar en la comprensión de la misión de sus vidas, en marzo de 2017, Annette Venables y su esposo Paul asistieron a un retiro silencioso de cinco días que transformó su matrimonio y sus vidas. “Mi esposo y yo estábamos a punto de quedarnos con el nido vacío. En ese momento ya llevábamos juntos unos 30 años, pero este retiro cambió drásticamente nuestro matrimonio.” Ella relató que otro cambio significativo fue su fundación de Tribe Rising India. Esta organización construye escuelas para niños de la tribu Santal en India. Su marido, que en el momento del retiro de 2017 estaba regresando a su fe, ahora dirige los Ejercicios Espirituales Ignacianos y es director espiritual.

Para ella, esto es un testimonio del poder del lugar: “Ni siquiera puedo empezar a explicar cómo hay algo muy, muy sagrado allí.” También ayuda a dirigir los ejercicios espirituales ignacianos. “Muchas personas vienen porque es un momento decisivo en sus vidas. O no han practicado ninguna fe durante mucho tiempo. Y buscan paz y consuelo.”  Este es precisamente el nuevo comienzo que ella y Rita, y muchos más, han encontrado en el JRC después de un retiro. Usando las palabras de Annette: “Terminó siendo un nuevo comienzo en todos los sentidos”.

Una Escuela de Ternura

Proveniente del centro de Los Altos, el Padre Greg Boyle, S.J., fundador de Homeboy Industries, dice: “El Centro de Retiro Jesuita es una escuela de ternura.” Tanto el Padre Chi como el Padre Kevin están completamente de acuerdo con esta evaluación. “Es una escuela de consuelo.” El Padre Kevin añade que “de consuelo” son las palabras que elegiría para describir sus experiencias con el JRC. Para el Padre Chi, la palabra que resume el centro es “sorprendente.” Explicó: “Seguido escuchamos que el lugar cambia la vida de las personas, especialmente de aquellos que lo visitan por primera vez. Incluso aquellos que vienen con frecuencia a hacer retiros y desean continuar su formación de manera continua, todavía dicen que se sorprenden casi cada vez que se quedan con nosotros.”

El Padre Chi considera humildemente un privilegio guiar, dirigir y escuchar a los participantes: “Siempre se van con lo que necesitan, incluso si vinieron sin saber necesariamente lo que necesitan.” Para él, esto muestra que estar abierto a ser guiado por el Espíritu Santo permite que Dios los sorprenda con cualquier mensaje que tenga para ellos.

En un mundo lleno de tantas distracciones, los retiros pueden ser una de las necesidades emergentes para todos los cristianos que desean permanecer arraigados y formados en su fe. El objetivo de retirarse brevemente de las exigencias del mundo es tranquilizarse para experimentar el amor y la ternura de Dios. Ya sea un retiro jesuita o un retiro a través de otra espiritualidad de la tradición católica, el JRC es rico en diversas opciones. El Padre Kevin está de acuerdo: “Todos deben hacer un esfuerzo intencional para pasar tiempo a solas con Dios de alguna manera. Puede que no sea en un retiro ignaciano o incluso en uno silencioso. Todos los católicos necesitan pasar tiempo a solas con Dios.”

Una Invitación Para Todos

En abril se llevará a cabo una jornada de puertas abiertas en el Centro de Retiros Jesuita, tanto para celebrar sus 100 años como para hacer una invitación especial a aquellos que nunca lo han visitado. Es una oportunidad única ya que el centro suele estar ocupado con retiros. “Los huéspedes recorrerán los terrenos y senderos y aprenderán sobre sus maravillosos 100 años de historia. Habrá jesuitas disponibles para responder preguntas sobre la espiritualidad ignaciana. También habrá una oportunidad de registrarse para retiros.”  Dyane enfatizó que, de hecho, todos están invitados, independientemente de su origen religioso o de cualquier origen. “Ya sea como primer paso o como parte de un camino de fe, un retiro es vital para cualquiera.” MN